“Si nadie puede verte… ¿para qué te escondes?” (2011) es una obra (1) conceptual. Ésta sucede a tiempo real, en directo, un día cualquiera en la habitación de un Macarra cualquiera. Éste tiene sueños relacionados con la música y el rock, entre otros, y como a muchos, le gusta tocar la guitarra. Mientras la toca se da cuenta de que se abstrae: percibe el mundo exterior de otra manera al centrarse en exclusiva en sus propios pensamientos. Esa energía mental es tan fuerte, tan impresionante, que las emociones se vuelven más fuertes que la realidad, es el Punto de Ruptura: a partir de ese instante todo vale. ¡Pues Vaya! El pensaba que para alcanzar ese estado tenía que estar tocando encima de un escenario delante de un entregado público y resulta que estaba equivocado, pues lo está consiguiendo sólo y en su habitación: no es tan importante el lugar en el que estés, lo importante es lo que estés haciendo.
En ese estado de euforia le abordan las sensaciones. Para empezar, se cuestiona qué es. Siempre se ha visto como un Macarra pero es ahora cuando se da cuenta de por qué lo es: por lo que piensa, por como afronta su vida, por sus principios… no por su apariencia externa. Lo que cuenta es lo que eres, no lo que ven de ti.
Durante la historia no iba a ser todo tocar… en su habitación tiene un ordenador con Internet. En un receso musical agarra el teclado y le da una pensada a las dimensiones que están tomando la Red de EnRedes que es Internet y el mundo digital… cómo enfoca su personalidad en ella y cómo proyecta su tiempo… no todo es progreso y evolución. También piensa sobre sus miedos y amenazas, hechos invisibles que le dificultan tomar sus propias decisiones.
De vuelta a la música vuelve con otras sensaciones, ahora de añoranza a su pareja… ¿Cuánta gente echa de menos a alguien y se apoya en la música? Parece que de esa manera es como si estuviese más cerca (Eléctrica). También experimenta en sus propias carnes el daño que se le hace a la Naturaleza… en el estado de embriaguez emocional en el que se encuentra se pone en la piel de un Árbol… un ser vivo que no tiene sentimientos pero sí responde a estímulos… y se avergüenza de la raza humana como especie cuando destroza y maltrata al Medio Ambiente y la Naturaleza (Reencarnaciones).
El viaje toca a su fin… las sensaciones obtenidas una vez alcanzado el Punto de Ruptura empiezan a disiparse, el Macarra vuelve a poner los pies en el suelo… y se encuentra impaciente por analizar e indagar sobre los pensamientos y sensaciones que han sucedido en poco más de 30 minutos en los que el desasosiego ha estado muy agitado. Se encuentra Impaciente, Impaciente por seguir su propio camino, por tomar sus decisiones, por vivir su vida. En este lapso de lucidez y clarividencia ha descubierto muchas cosas sobre el mismo y toca ponerse manos a la obra. La experiencia vivida se podrá repetir otras veces pero cada una de ellas será única.
EPÍLOGO: y qué más da que el Punto de Ruptura se alcance tocando la guitarra, cantando, haciendo deporte, leyendo, pintando, bailando, riendo, pescando, jugando, paseando, escribiendo… ¿qué más da el lugar y la forma? Lo importante es lo que sientes cuando lo alcanzas. Este trabajo no habla del Punto de Ruptura… habla de un Punto de Ruptura… ¡BUSCA EL TUYO!
SOBRE LA PORTADA: puestos a dar pistas… el cuadro que he pintado y aparece en la portada es una revisión ¿futura? sobre el mito de la caverna de Platón.
